Star Wars Squadrons: una nueva aventura en una galaxia muy, muy lejana

3 noviembre, 2020Francisco Rubio

¿Un nuevo juego de EA sobre Star Wars? Habrá quien se eche a temblar y quien tenga fe, dados los buenos resultados que dio el anterior… Star Wars Squadrons es, en palabras de la propia empresa, un lanzamiento modesto pero lleno de ambición.

Pero primero, démosle contexto a todo. Luces fuera, la orquesta empieza a sonar, el texto amarillo corre por la pantalla.

Anteriormente en Star Wars…

Hace casi una década desde que Disney comprara Star Wars. Concretamente, 2012 fue el año de la bomba: la empresa del ratón Mickey se hacía con la exclusividad de la saga de fantasía espacial por un módico precio (unos 4.000 millones de dólares) y George Lucas, creador de la misma, se hacía a un lado para que su criatura volara hacia nuevos horizontes.

Solo un año después, otra bomba hacía explosión: Disney cerraba la mítica LucasArts, división de videojuegos creada en 1982 con el nombre de Lucasfilm Games y responsable de títulos como Maniac Mansion, Monkey Island, Star Wars Dark Forces, Jedi Knight y un largo etcétera de títulos, impresionantes algunos, prescindibles otros, pero con peso dentro del mercado a fin de cuentas. Se encontraba, de hecho, desarrollando el prometedor Star Wars 1313 en el momento de su cierre, lo que conllevó, claro está, la cancelación de este.

Recientemente parecen haber reculado y vuelto a dar esperanzas sobre la puesta en marcha, de nuevo, de la mítica empresa.

Al poco, año 2013, Disney anunciaba que le “prestaba” la licencia de Star Wars a Electronic Arts. La empresa estadounidense tiene una larguísima trayectoria en lo que a licencias cinematográficas se refiere: El señor de los anillos, Harry Potter, ¿por qué no la saga de los Skywalker?

Bueno, nadie le dijo a Disney que la mítica EA no atravesaba su mejor momento.

Tras siete años con la licencia, EA lanzó dos shooter online que fueron ampliamente criticados por jugadores y prensa; levantaron tremendas polémicas en lo que a cajas de loot se refiere que incluso terminaron, en algunos países, en los tribunales. Cancelaron producciones de mucho interés para los jugadores, como el proyecto en que trabajaba Amy Hennig, directora de Uncharted, y protagonizaron una increíble reculada al lanzar Star Wars Jedi: Fallen Order, una mezcla de todo lo que los jugadores sí que querían ver.

Tan errática ha sido la política de EA con respecto a la licencia Star Wars, que aunque mantendrá los derechos hasta el año 2023, Disney ya parece dispuesta a emplear mejor su capital y desarrollar sus propios juegos.

Pero EA parece haberse puesto las pilas, aprender de los errores y darle a los jugadores lo que quieren: videojuegos de calidad basados en una de las sagas más importantes de la historia de la cultura pop.

Una nueva forma de redención

 Star Wars Squadrons va un paso más lejos de lo que fue Jedi Fallen Order: no solo ha hecho los deberes escuchando a los jugadores, sino que se atreve a arriesgar, a darle vueltas a las historias, a las posibilidades. Una de las cosas más espectaculares en la saga creada por Lucas hace cuarenta años son los combates espaciales, y algunos de los videojuegos más queridos por los fans fueron los que componen la saga X-Wing, ¿por qué no volver a ello? Este debió ser el punto de partida para Star Wars Squadrons, un videojuego que centra su atención en el pilotaje de las icónicas naves del universo Star Wars, pero puestas al servicio de la increíble tecnología de que gozamos hoy día. ¿El resultado? Algo espectacular a nivel visual, inteligente a nivel narrativo y divertido a nivel jugable.

Star Wars Squadrons inicia su historia tras El retorno del Jedi y nos pone en la posición de jugar con La Nueva República y con lo que queda del Imperio Galáctico en un enfrentamiento cuyas consecuencias resonarán en el nuevo canon de las franquicias. Una campaña que no esconde su intención de ser un largo tutorial para el modo online, pero que lo hace con mucha elegancia, presentando una historia simple pero atractiva, un diseño artístico y un grafismo que emplean ese aire retro que tanto se echó en falta en la trilogía de precuelas de los años 2000 y que tan buenos resultados está teniendo en la serie The Mandalorian. Toma lo mejor de Star Wars a nivel visual y mezcla de forma acertada los elementos para que el resultado esté a la altura de las expectativas del jugador.

A nivel gráfico, todo lo que vemos en pantalla es realmente espectacular. Las batallas son trepidantes, los escenarios, aunque no muy amplios, son característicos y sirven como un apabullante telón de fondo para nuestras escaramuzas, el diseño de los personajes es bastante acorde al imaginario de la saga y la recreación de las naves, tanto por fuera como en el interior de las cabinas, no deja que ninguna minúscula pega empañe el conjunto. Ciertamente es un trabajo espectacular y está claro que EA ha querido que el jugador se maraville con la puesta en escena.

Pues bien hecho.

Si dejamos de lado todo el asunto de los efectos especiales y nos centramos en la jugabilidad, Star Wars Squadrons hace bien lo que mejor sabe: no ponerse pretencioso. Nos cuenta una historia sencilla, una serie de buenas excusas para pasarnos unas siete horas a bordo de nuestras naves, con el toque justo de épica, pero con un trabajo muy profundo en las mecánicas. No solo porque las naves tienen toda una serie de estrategias, funciones y fortalezas que deberemos explotar dependiendo de la situación, sino también porque la IA responde bastante bien y no me he encontrado en mis partidas ningún atolladero o salida de tono extraña que empañe el conjunto.

No hablaré de simulación (porque estas naves, por mucho que las conozcamos desde pequeños como las palmas de nuestras manos, no existen), pero sí que hay un grado muy alto de perfeccionamiento en lo que al manejo del vehículo se refiere. Tanto que el juego logra hacernos olvidar que nunca vamos a bajar del caza y que toda la acción se ve limitada a escaramuzas en las que hay que buscar excusas para que los niveles y los enfrentamientos gocen de variedad. Algo que, sorprendentemente, consigue mucho mejor que otros juegos de naves que me he encontrado.

El pilotaje es preciso, el apunto lo es, la acción resulta rápida, inmediata, y nuestros reflejos se ponen a prueba a cada momento, pero el juego también sabe como enseñarte, como dosificar la información hasta estar preparados y dar el salto al multijugador (y creedme, necesitaréis acabar la campaña o no duraréis en la partida online ni diez segundos).

Y viene con algún extra jugoso.

Tengo un mal presentimiento… La realidad virtual

Hace unos años volé hasta Londres con el amigo Toni Piedrabuena de 3DJuegos, invitados cordialmente por EA,  para probar la realidad virtual de Star Wars Battlefront. Solo se trataba de un nivel en que había que realizar una misión sencilla de escolta y defensa, pero estoy seguro de que allí estaba el germen de lo que ha terminado siendo Star Wars Squadrons. Lo que más me apetecía era probar de nuevo aquella sensación de verme dentro de un Ala-X; experimentar el espacio de mi saga favorita del cine como nunca antes. Para ello, desempolvé mi kit de Playstation VR y me puse manos a la obra.

Pero claro, hay que controlar las expectativas o lo devoran todo…

Star Wars Squadrons en su modo de realidad virtual para Playstation me ha parecido terrible. Y es que leyendo otras críticas y escuchando a amigos de otros medios, creo que el error es que el modesto casco de Sony no tiene poder para mover una bestia como la que ha parido EA. En Playstation VR el downgrade es tan exagerado que el juego parece de cartón piedra: se pierde toda espectacularidad, el mareo es considerable (pese a los esfuerzos de adaptabilidad que nos presenta el juego, que no son pocos y se agradecen), todo tiene un aspecto grotesco, deslustrado, como si estuviéramos jugando en 1998 y no en 2020.

Jugué un par de misiones y tuve que dejarlo.

Una experiencia que empaña verdaderamente el juego, pero que me atrevo a afirmar que no es culpa del mismo, sino del dispositivo de Playstation. Hace años en tierras británicas aluciné con lo que viví, pero entonces aquello era un solo nivel, con pocas naves, poco detalle y mucho artificio para que todo luzca de manera sorprendente. Demasiadas veces me he encontrado ya que cuando el juego tiene mucha complejidad, la realidad virtual puede no ser la mejor manera de jugarlo. Al menos, en lo que a consolas se refiere.

Los que quieran lanzarse a tierras virtuales y convertirse realmente en pilotos de la mítica saga, mejor que tengan un buen ordenador y un equipo de realidad virtual capaz de mostrar lo hermoso que realmente luce Star Wars Squadrons.

Una nueva esperanza

Star Wars Jedi: Fallen Order lo jugué de principio a fin y me gustó, pero reconozco que era muy poco original. Tomó buenas ideas de muchos juegos y apostó sobre seguro. Un triunfo que EA necesitaba. Sin embargo, Squadrons es diferente: luce por sí mismo, es original, es bueno.

En conjunto, Star Wars Squadrons no me ha parecido un trabajo menor, o menos ambicioso, más bien lo contrario: un juego trabajado, que sabe lo que busca y a quién va dirigido. Una puesta no del todo segura, y donde muchas cosas podían fallar, y donde este título sale gratamente airoso.

 

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Artículo anterior Siguiente artículo