Retrofighters Defenders: la solución definitiva para el retrogaming en PlayStation
La primera PlayStation es, sin duda, la videoconsola a la que más cariño le guardo. Aunque en mis primeros pasos como jugador me acompañaron diversas consolas de mi querida Sega, lo cierto es que fue con la gris de Sony con la que descubrí en todo su esplendor mi amor por este medio de entretenimiento. En una época de mi vida con pocas responsabilidades y mucho tiempo para dedicar a mis aficiones, tuve la suerte de explorar el nutrido catálogo de la primera PlayStation durante cientos de horas.
El paso de los años trajo la consecuente carga nostálgica: cuando PS2 llegó a mi hogar, no tardé en deshacerme de la consola anterior… un error que ya en mi madurez resolví haciéndome primero con una preciosa PSOne con pantalla LCD incorporada, y más tarde con una PlayStation Mini, ese perverso producto ideado por Sony, más bonita para exponer que práctica para jugar. Así, no puedo decir que en mi casa no tenga posibilidades a la hora de rememorar mis viejos tiempos a los mandos de la primera PlayStation: mi televisión CRT con la PSOne conectada, mi sistema RGB-Pi, la PlayStation Mini… aun así, no conseguía disfrutar al 100 % de la experiencia en ninguno de estos sistemas. El mando era el culpable de ello.
Una actualización necesaria
Y es que si algo lastra una experiencia en esto del retrogaming, es el uso de los mandos de la época. No tengo pega alguna con el diseño del DualShock —ni con sus homónimos en PlayStation 2 y 3—, pero, francamente… al menos en lo que a mí respecta, el mando con cable es algo que tenía superado y olvidado. Si a esto le sumamos que mi DualShock 2 llevaba un tiempo muerto, os podéis imaginar la ilusión con la que recibí el nuevo Defender, la última maravilla de la compañía estadounidense Retrofighters que ya lleva un tiempo dándonos alegrías a los amantes del videojuego antiguo, con joyas como el mando para Dreamcast Striker DC.
Con Defender, Retrofighters pretende hacer llegar al mercado al mando definitivo para videoconsolas retro de Sony, haciendo gala de sus máximas de calidad y del mimo que ponen en los detalles. Con un diseño y agarre más parecido a un controlador de Xbox que al del DualShock original —lo cual, superado el shock inicial, se acaba agradeciendo—, el mando cuenta con todo lo necesario para disfrutar a tope del catálogo de las primeras PlayStation: conexión inalámbrica, batería de hasta 10 horas de autonomía, cruceta, doble stick analógico, cuatro botones de acción, cuatro gatillos L y R, botones Select y Start, así como tres extras: botón central «home» y botones «turbo» y «clear». Defender cuenta también con diversos LED de información, así como puerto USB-C para cargarlo o conectarlo por USB a los diversos dispositivos compatibles. Dicha compatibilidad, por cierto, es bastante amplia gracias a los dos adaptadores inalámbricos que Retrofighters incluye en la caja: uno específico para las primera y segunda PlayStation, y otro USB para el resto de dispositivos. Así, Defenders es 100% compatible con PlayStation 1, 2 y 3, así como Nintendo Switch y PC. En mi caso, he podido probarlo en Raspberry Pi con el sistema operativo de RGB-Pi —el cable definitivo para disfrutar de emulación retrogaming en televisiones de tubo— y funciona perfectamente. Poder disfrutar de títulos que jamás llegaron por aquí con este mando y en su resolución original es, amigos míos, una auténtica gozada…
Calidad Retrofighters
Tras disfrutar algunos productos de este fabricante estadounidense, no me cabía duda de que este mando para PlayStation estaría a la altura en lo referente a estándares de calidad. Aun así, cuando lo tienes por primera vez en las manos, este mando sorprende por su acabado absolutamente premium, más próximo a lo que podemos encontrar en modelos oficiales que en el mercado de los controles third party o compatibles. El tacto de la carcasa es espectacular, y los acabados de sticks, botones y cruceta un auténtico lujo.
Como no podía ser de otra manera, la experiencia de juego es totalmente plug & play. Tanto haciendo uso del adaptador USB como del específico para consolas de Sony, el mando no necesita de ninguna configuración más allá de las típicas en hardware como ordenadores o Switch. El tacto de los botones de acción y sticks a la hora de jugar son toda una gozada, así como el recorrido de los gatillos laterales. El único «pero» que le puedo poner es a la cruceta, que aunque confortable en ocasiones no responde todo lo bien que debería en momentos de uso intenso, como por ejemplo en juegos de lucha 2D.
El complemento perfecto para tu PlayStation
En definitiva, con Defenders la compañía Retrofighters ha vuelto a hacer realidad el sueño de muchos jugadores amantes del retro: un mando muy versátil, sin cables y con una autonomía sorprendente —¡hasta 10 horas!—, disfrutable tanto en las primeras tres consolas de Sony como en ordenadores y Nintendo Switch, con un diseño de lo más acertado, y acabados premium. Una joya que permite al revivir la historia de una marca tan mítica como PlayStation sin el engorro que suponen los cables, sin por ello renunciar a los estándares de calidad que estos históricos sistemas merecen.
El Defenders de Retrofighters está disponible en cuatro colores: gris, negro, azul translúcido y verde translúcido. Su PVP es 52,99€, un precio más que razonable para un producto con este nivel de acabados.
*Unidad de análisis cedida por Retrocables.es, distribuidor oficial de Retrofighters en España.*