El cómic olvidado de Tom King
Es curioso cómo, cuando un autor llega a la cima y se vuelve famoso, se revaloriza todo el trabajo que realizó antes de alcanzar la fama. Obras que antes carecían de relevancia ahora son raras joyas de las que los lectores se vanaglorian de conocer. ¿Cuántas veces habremos escuchado ese «pues yo lo conocía antes de que fuera famoso/a»? ¿Y cuánta rabia nos da?
Cuando descubrí a Tom King este estaba trabajando en Visión, una pedazo de obra en la que se basó la serie de televisión Bruja Escarlata y Visión, pero que ni de lejos era su primer trabajo. A medida que fui siguiendo sus obras, presentes y pasadas, me fueron cautivando: Batman, Sheriff de Babilonia, Omega Men, Míster Milagro,… Y en ese deseo de encontrar más trabajos suyos me topé con un cómic que no esperaba: Justice League: Darkseid War: Green Lantern.
Este cómic, típico Oneshot de evento superheroico, curiosamente había sido publicado en España en un tomito de ECC llamado Liga de la Justicia: La guerra de Darkseid, nuevos dioses. El tomo, seamos sinceros, está repleto de historias mediocres, típicas de esos spinoffs que se hacen para sacar unos cuartos más durante el cruce superheroico de turno, de las que solo se espera un «anda mira, así que esto es lo que pasa con x personaje». Pero estamos hablando de Tom King, claro, no podía quedarse ahí.
Es una historia introspectiva, original, y mucho más profunda de lo que en un principio pueda parecer. Para poner un poco de contexto —spoiler alert—, en dicho evento Darkseid muere y, a causa de esta muerte, las cajas madre —que más o menos todos conocemos por esa película de Joss Whedon o Zack Snyder— empiezan a buscar un nuevo dios que las controle. Esta búsqueda afecta a todos los superhéroes que conforman la Liga de la Justicia, algunos caen en la tentación de ser dioses y otros no. No entraré en más detalles.
Hal Jordan empieza viajando a Oa, planeta central de los Green Lantern Corps, ya que la madre caja ha sido atraída por el poder de la Batería Central, que da poder a todos los lanterns. Cuando llega se encuentra la desolación más absoluta. Todos los lanterns han muerto, y el planeta está lleno de demonios y cadáveres reanimados de sus compañeros. Es una lucha inútil de la que Hal no está dispuesto a escapar.
Este combate se alterna con una escena de Hal de pequeño en una iglesia. Su padre, piloto, ha muerto en un accidente de avión, y su madre lo manda a poner una vela para que encuentre cierto alivio. Algo inútil para un chico joven que no entiende por qué dios dejaría que su padre muriese. En esta iglesia hay un hombre, con una cazadora de cuero, que asegura haber conocido a su padre y le ayuda a entender por qué dios no hizo nada:
«Tienes razón, colega. Cuando murió tu padre dios estaba mirando, igual que estabas mirando tú. (…) Verás, un dios carece de una cosa que nosotros sí tenemos. La voluntad. Nuestra voluntad (…) Este mundo lo creas tú colega, tú decides».
Las escenas se van alternando. Mientras que en el presente Hal está a punto de perecer, en el pasado está a punto de desesperarse y perder la esperanza. En el presente la madre caja no para de hacerle la pregunta «¿quieres ser mi dios?», a la que Hal responde: «¿Quieres un dios? Me llamo Hal Jordan. Mi padre abrió el cielo en canal». Con esto Hal se vuelve el dios de la luz, y como la luz estaba en todas partes y en todo momento. Presente y pasado. Al lado de un joven Hal Jordan que se pregunta por qué su padre no va a volver con un desconocido que le explica cuál es el verdadero significado de ser un dios.
Después de hablar consigo mismo en un pequeño deus ex machina —bastante literal—, pasan cosas que no voy a destripar más, porque espero que con este texto os haya picado el mismo gusanillo que me picó a mí buscando esta obra. Más curioso aún es que el dibujante es Evan «Doc» Shaner, con el que recientemente trabajó en Strange Adventures, otra obra más que recomendable.
¿Merece la pena un tomo entero, que ahora es complicado encontrar, por una sola historia? No sé, quizás depende de lo fan que os consideréis, pero no lo creo. ¿Merece la pena leer esta historia sin saber nada del evento? Absolutamente. Este número es una peña joya, una de esas obras que entienden perfectamente al personaje que están tratando y que son capaces de comprimirlo en un suspiro. Hace poco Tom King ha anunciado que está trabajando en algo nuevo para DC. Ojalá sea Green Lantern.