«El anime es ahora un fenómeno más grande que nuestro trabajo»: entrevista con Selecta Visión
Selecta Visión es ahora mismo la mayor empresa de distribución de anime en España. En una época en la que el medio está viviendo uno de los mejores momentos de su historia, con el estreno en cines de Guardianes de la noche: Tren infinito —la película de anime más taquillera de la historia, y el manga más vendido del año pasado— y la emisión «simulcast» de la última temporada de Ataque a los Titanes —probablemente la serie de anime más famosa de la última década—. Para esta entrevista hablamos con Àngela Estorach, Directora de Marketing en Selecta, y con Manu Guerrero, Director del Departamento de Home Entertainment.
Contadme un poco cuál es el alma de Selecta Visión, su corazón, su historia como empresa.
Àngela Estorach: Selecta Visión tiene como alma el traer contenidos audiovisuales a España y distribuirlos para que todo el mundo tenga acceso a ellos. Dentro de estos contenidos nos hemos especializado en el anime, y somos los que tenemos el mayor catálogo de anime en castellano en España, pero aún así tenemos también otro tipo de contenidos, por ejemplo películas de terror o películas románticas. Básicamente lo que queremos hacer es coger el contenido que nos gusta de todo el mundo, contenido que nosotros quisiéramos ver, lo traemos aquí y lo «localizamos», que digamos, lo traducimos y adaptamos para que todo el mundo pueda tener acceso a él en diferentes formatos, para que tu puedas ir al cine a ver esa película o comprarlo en ferias, o para tu casa en formato home video, o que lo puedas ver en Amazon o en Netflix.
Manu Guerrero: Todo esto que nosotros hacemos, la empresa como tal lo lleva haciendo desde hace 35 años. Yo llevo 20 ya en Selecta pero mi jefe, que fundó la empresa, el señor Jorge Gabarró, ya la creó con esa idea de traer contenidos a España, aunque inicialmente eran unos contenidos totalmente diferentes, porque empezamos con ópera y ballet. Todo esto en una época en la que la distribución funcionaba de una manera muy distinta, se movía más por grandes centros comerciales como El Corte Inglés y Galerías Preciados o cosas así, en una época además en la que incluso el Home Video, la posibilidad de ver contenidos en tu casa, estaba justo aterrizando. Te hablo antes incluso del Blockbuster, o sea, de los primeros productos que se podían adquirir en VHS o Beta, en un momento en el que realizar la labor de localización y distribución era complicadísimo para esos reproductores tan caros.
A medida que fue creciendo, Selecta Visión se fue especializando en otro tipo de contenidos, más hacia la animación como Snoopy —Peanuts— o Tintín, este nicho de mercado que digamos de los niños y la gente joven, con programas incluso para televisión como el Desesperado Club Social o el Club Megatrix. Luego a mediados o finales de los 90, en estos mercados a los que vamos las empresas, nos dimos cuenta de que el anime empezaba a estar de moda, y decidimos apostar por ello, compitiendo con gente como Manga Films y SAV Vídeo. Nuestras dos primeras cintas VHS fueron Mermaid Scar y Ogre Slayer, si no me equivoco, y luego ya en el 98 o 99 vinieron Serial Experiments Lain, Cowboy Bebop, y a partir de ahí pues recuperamos Neon Genesis Evangelion alrededor del 2000 que fue cuando yo entré en la empresa, y fuimos creando y potenciando el catálogo que tenemos ahora.
A la hora de la verdad, ¿cómo se decide la compra de una película o una serie, y qué pasos posteriores implica traer eso al territorio nacional?
Àngela: La primera decisión siempre es editorial. Cada semana se hace una reunión entre todos los editores, donde se ponen en común las tendencias del mercado, lo que está funcionando o no, y el equipo de compras y adquisición pone algunas propuestas sobre la mesa, lo que han hablado con los licenciadores con los que tenemos derechos establecidos, y todo esto. Entonces ahí es donde se toma la primera decisión, que es: me interesa, no me interesa, es viable, no es viable. A partir de ahí es cuando se oferta, se hace todo el proceso de compra, todo esto antes de empezar a distribuir y explotar el producto.
Manu: Los editores tenemos una experiencia ya de décadas, y ya sabemos más o menos qué tipo de productos pueden funcionar mejor o peor en diferentes mercados o en diferentes secciones, porque además en Selecta Visión estamos separados por departamentos, y cada departamento tiene unas necesidades específicas: hay contenidos que funcionan mejor en el departamento de Cine, o en el de Home Video, o en el de plataformas de SVOD —Vídeo Bajo Demanda—. A nivel puramente del producto, por supuesto que hay productos que son ya súper populares, digamos, una apuesta segura, pero también hay otros menos populares por los que merece la pena correr un riesgo. Ningún editor audiovisual o de papel te dirá nunca que todo lo que compra es un éxito, y si te lo dicen sería mentira (risas). Al final todo se resume en que manejas una información histórica o de ventas que te permite más o menos tomar decisiones para defender la compra de un producto. Y si se decide por ello, pues adelante, empieza el trabajo.
«Nosotros apostamos por los productos en los que creemos, como trabajadores y como fans».
Àngela: También es importante tener en cuenta que los productos tienen unas ventanas que muchas veces están determinadas por quienes tienen las licencias. Nosotros tenemos unas fechas concretas para emitir tal o cual película en cines, por ejemplo, y no podemos ni adelantarnos ni retrasarnos. A veces nos llegan comentarios en redes sociales en plan, «¿por qué no habéis traído esto aquí aún?», y es difícil explicarlo, porque realmente nosotros siempre queremos estrenar las cosas lo más pronto posible, para que el fan pueda disfrutarlo y también para adelantarnos a la piratería. Pero es difícil, nosotros intentamos siempre que todos los departamentos estén bien ordenados y que la programación se ajuste todo lo posible a las reglas que nos marquen los productores.
También te digo que a nosotros nos interesa sobre todo apostar por productos que tengan una concepción de 360º, productos que tengan una vida larga y se hagan parte de nuestra idiosincrasia, no nos gusta emitir una película y ya está, ahí se queda. Buscamos cosas que se mantengan en el imaginario del fan español, que se emitan en cine y luego en plataformas y luego la gente quiera tener en su casa.
Hablando del fan español, ¿cómo está ahora mismo la situación del anime en España? ¿Cómo ha evolucionado desde que el anime empezó a petarlo allá por los años 90?
Àngela: Ahora mismo el anime esta muy fuerte. Dentro de los fans del anime tenemos como dos perfiles, uno sería el «nuevo adopter», digamos el perfil de 15 a 25 años, al que le gusta nuevas licencias, como My Hero Academia, Ataque a los Titanes, y todo esto; y el otro es un perfil ya de 25 a 45 años o así, que es el perfil más nostálgico, al que le gustan los animes de toda la vida, Dragon Ball, Slayers. También son dos formas distintas de consumir, como es normal, uno busca más el contenido en plataformas de streaming, más directo, donde quiere y cuando quiere, mientras que el otro tiene una concepción más coleccionista, y busca ediciones de Home Video más cuidadas, que le den un valor añadido al producto.
De todas formas, si algo está claro es que todos quieren ir al cine a ver las grandes franquicias, que es lo que nosotros llamamos esta concepción de «la gran fiesta del anime». Tú pasas ahora por delante de Norma Comics y ves gente siempre haciendo cola, vas a las salas y hay gente de todas las edades, ahora todo esto como que se reivindica mucho, es un orgullo formar parte de esta comunidad.
Manu: En general ahora estamos en medio de un fenómeno para los fans de los que sea, no sólo del anime. En los 80 ser fan y super mega friki de algo no estaba bien visto, y nadie le daba valor a conocer un montón de datos totalmente irrelevantes sobre El Equipo A, El Coche Fantástico o Mazinger Z. Ahora yo hago conferencias hablando de BRB y la distribución de D’Artacan y los Tres Mosqueteros y los estrenos de animación a las 15:30 de la tarde los sábados y domingos. Todo esto se ha normalizado mucho. Las cosas han cambiado, la televisión tuvo una época en la que apostó por el anime con ventanas en abierto que ahora ya casi ni existen, y sin embargo llegaron las plataformas y todo el negocio dio un vuelco.
Hablando de vuelcos, el terreno del anime siempre ha sido un camino con bastantes curvas peligrosas, en lo que respecta a la piratería, y a la llegada ahora de plataformas de streaming. ¿Cómo habéis vivido vosotros todo esto?
Àngela: Aquí yo creo que hay varias cosas importantes. Inicialmente hubo un momento un poco catastrofista, cuando llegaron plataformas como Netflix o Amazon, en el que todo el mundo pensaba que nos íbamos a pique, que nos íbamos a quedar sin vender nada, que la gente no iría al cine. Pero al final nos hemos dado cuenta de que tiene que haber una convivencia, que estas grandes plataformas necesitan también distribuidoras para que los productos que ellas cogen ya se hayan hecho grandes en otro lado, que hayan llegado al cine, y tengan una campaña detrás que haga que la gente conozca el producto para que después se consuma en la plataforma.
Aún estamos todos aprendiendo, es un diálogo abierto, todas las formas son explorables, y cualquiera de ellas es preferible a la piratería. No tanto porque nos opongamos directamente ni porque no queramos que la gente tenga acceso a los contenidos, por supuesto, sino porque cuando un contenido no se consume de manera legal, nosotros no tenemos ningún dato con el que trabajar. No sabemos lo que funciona o lo que no, lo que se está viendo o lo que no. Es como trabajar a ciegas.
Evidentemente, sería imposible localizar un producto, pagar las licencias y contratar dobladores si nadie cobrase nada por su trabajo. Si los productos no se consumen de manera legal, no salen las cuentas de ninguna manera.
Manu: La llegada de las plataformas lo que ha hecho es poner las cosas en su sitio. Ahora trabajamos con una forma de consumo transparente, que permite un proceso de trabajo mucho más normalizado. Nosotros nos hemos tenido que reinventar muchas veces, pero yo siempre he preferido reinventarme por algo bueno, por algo positivo. Aún sigue habiendo posibilidades, y la prueba es que aún hay gente que nos compra home video, a la gente le sigue gustando un producto bueno y editado, en gran formato, la gente lo quiere tener, lo quiere tocar.
Te hablo desde mi experiencia de más de 20 años. Y además hay un montón de gente detrás de este mecanismo, un montón de profesionales y familias detrás de los focos, un montón de traductores, dobladores y distribuidores que trabajan con nosotros. Es un entramado muy, muy grande, que solo resulta posible si se trabaja de manera abierta y honesta.
En cuanto a reinvenciones, resulta obligatorio mencionar vuestra apuesta de estos últimos años por los «simulcast» —emisiones gratuitas en abierto poco tiempo después del directo en Japón—.
Àngela: En el tema de los «simulcast», básicamente nuestra idea era poder ofrecer a la gente la opción de ver el contenido al momento de una manera legal, ofrecer una alternativa fácil para el fan que también nos funcionase a nosotros para dar a conocer la marca a más gente y amplificarla.
Manu: Lo hemos hecho ya con un montón de series, como Haikyuu! o Atom the Beginning. Siempre hemos intentado ofrecer algún «simulcast» en cada temporada, aunque evidentemente no podemos ofrecer todas las series porque no es nuestro sector ni tenemos los derechos. La opción en sí misma de hacer esto vino de Japón, debido a la situación de piratería masiva que se vivía en Europa y en el resto del mundo. Para nosotros esto nos ha servido para lo que buscamos, que es hacer comunidad emitiendo las grandes temporadas de tus animes favoritos, con todo el trabajo que lleva detrás. Ponemos un montón de esfuerzo para tener lista la emisión una o dos horas después de que se emita en directo en Japón, y luego te encuentras al minuto que tu mismo vídeo, con el logo de Selecta Visión, está ya subido en todos los sitios piratas (risas).
«Los piratas también se han reinventado, y han aprendido a quitar los banners con porno».
Antes los sitios piratas eran feos, tenían un montón de banners de sexo y todo esto, pero ahora han cambiado su imagen y la gente se ha acostumbrado a los nuevos entornos, más limpios. Han aprendido a crear comunidad, también ellos (risas). Entonces es una lucha más difícil. Pero bueno, al final todo este esfuerzo nos ha valido más de un millón de visualizaciones de la última temporada de Ataque a los Titanes por ejemplo, en nuestra propia plataforma, que es una barbaridad, es como, wow. No habíamos conseguido estos números ni cuando hacíamos los «simulcast» directamente en YouTube. Para nosotros ha sido todo un triunfo, que lleva un montón de trabajo detrás para que la gente venga a nuestro espacio, a nuestra casa.
Àngela: Yo creo que hemos logrado dar un poco con la fórmula, después de todo el trabajo que hemos invertido durante años, en la sombra. Yo recuerdo hace tiempo que siempre hay unas épocas en las que pones mucho esfuerzo, y te sale mal, y frustra un montón. Esto lo hemos vivido en profundidad, varias veces, y luego de repente viene un estreno o una ola que ni te esperas, y supera todas tus expectativas, y se te lleva. Se crea un fenómeno que es más grande que nosotros, que en realidad nos pertenece a todos, a los fans, que son quienes lo hacen grande. Entonces sí que te sientes bien y disfrutas, cuando vas al cine y ves a la gente salir emocionada o incluso llorando. Para mí esto es lo más bonito, es lo que hace que valga la pena.
Hablar de anime es hablar también de una discusión eterna sobre doblaje o versión original. ¿Cuál es la visión desde dentro de la industria?
Àngela: Yo la percepción que tengo es que la gente prefiere, en su mayoría, ver el anime doblado. Al final si tú pones en el cine, por ejemplo, una película en dos versiones, la original y la doblada, el consumo es bastante mayor en la versión con doblaje. La cosa es, por supuesto, dejar que la gente elija, que existan ambas opciones. Ahora hay más acceso, antes era imposible acceder a la versión original porque las cosas llegaban a la televisión ya dobladas y no tenías otra, y esa es la razón de que gente como yo tengamos Bola de Dragón grabado en catalán y no podamos verla ya de otra manera (risas). Pero ahora puedes acceder a las cosas más fácilmente en su versión original, seleccionar el idioma que te guste, y también hay un mercado mayor para localizar productos que antes nunca hubiesen llegado a España.
Manu: Es innegable que la balanza está mucho más a favor del doblaje en España, esto es así, a pesar de lo que se diga. España en ese sentido siempre ha sido un país con una gran trayectoria de doblaje, con grandes actores que además nos han hecho sentir más todas estas experiencias y las han hecho más cercanas para todo el mundo. Comercialmente hablando, yo te aseguro que sería pegarse un tiro en el pie lanzar grandes estrenos sin doblaje, la gente no lo entendería y tampoco nuestros fans, que son precisamente quienes nos lo piden doblado, lo puedes ver tú mismo en nuestro Twitter. La gente aún se sorprende por el tipo de localización que se realiza: es una traducción graciosa, con mucho ímpetu, porque localizar un producto va más allá de traducir lo que se dice y ya está.
Es cierto que mucha gente puede ver una escena en japonés con subtítulos y no tener ningún problema, y disfrutarlo, pero otra gente necesita esa cercanía del idioma para emocionarse y que se le ericen los pelos. Pero es que además el doblaje también permite que se normalice más, que tu puedas ponerle una película o una serie a tus padres o a tus amigos y puedan verlo y entender el por qué te gusta, sin que les de palo estar leyendo los subtítulos o entender cómo funciona el anime en japonés.
Después de todo esto, ¿cuál creéis que puede ser el futuro de Selecta Visión? ¿Qué proyectos os quedan bajo la manga?
Àngela: Yo creo que el futuro vendrá por seguir expandiéndose. Y, por supuesto, para mí lo más importante es seguir haciendo que nuestra comunidad crezca, desde el punto de vista del marketing y también desde el punto de vista emocional, al final es lo que mejores resultados aporta. A mí como profesional, el que se nos asocie con un producto bueno, que le guste a la gente, que se emocione, me hace sentirme parte de todo esto, de esta familia expandida. Para mí es la parte más gratificante, como he dicho antes, y lo que me gustaría continuar haciendo con todas las herramientas posibles, las que hay y las que vengan en los siguientes años. No sé qué vendrá en el futuro, pero la única solución será ir hacia allí, de frente.
«Seguiremos estando allí donde estén nuestros fans, aunque tengamos que reinventarnos en el proceso».
Manu: Para mí ese futuro que mencionas ya ha llegado, porque yo estoy flipándolo mucho con todo esto ahora mismo (risas). Ahora mismo hemos empezado hace poco a distribuir incluso videojuegos, que no me lo hubiese esperado nunca, el abrir un departamento específico para ello. De alguna manera, es la única pieza que faltaba. Ahora mismo creo que estamos tocando todas las teclas que podríamos tocar, y no se muy bien qué más podría imaginarme. Como dice Àngela, no se como vendrá el futuro y cómo nos tendremos que seguir reinventándonos, regenerándonos, pero seguiremos ahí, donde se nos necesite.
Àngela: Al final yo creo que el resumen de todo esto, nuestro objetivo, el de todos los que trabajamos en Selecta Visión, es ir más allá de ser un canal a partir del cual se consuman series, películas o lo que sea. Buscamos que la gente se sienta parte de esto, de esta comunidad, queremos crear algo más humano, más cercano al trabajo que hacemos, a nuestro amor por las cosas que traemos a España y por la gente que lo consume y nos permite seguir adelante.